Programa Pro-Adolescente
Con el fin de encontrar formas adecuadas y eficaces de actuar en conjunto con la comunidad en la construcción del bienestar común y de una sociedad más justa e igualitaria, la Cámara de los Diputados creó hace más de 20 años el Programa de Apoyo al Trabajo del Adolescente — Pro-Adolescente. Un programa de responsabilidad social cuya esencia es la inclusión social de jóvenes a través de la educación por el trabajo.
La Ley nº 10.097/2000, conocida como ley de Aprendizaje, regula la formación técnico-profesional del adolescente aprendiz inscrito en el Programa, lo que torna posible el contacto de ese joven con atribuciones compatibles con su desarrollo físico, moral e psicológico.
Funcionamiento
Se celebra un contrato entre la Cámara de los Diputados y una institución sin ánimos de lucro, cuyo objetivo sea proporcionar al adolescente la educación profesional. Actualmente, la institución calificadora de los aprendices es el Centro Salesiano do Menor - CESAM, que además de empartir el curso teórico de aprendizaje, es responsable de la inscripción, selección y contratación y el seguimiento psicopodagógico y funcional de los adolescentes que actúan en la Casa.
El Pro-adolescente cuenta con centenas de jóvenes que trabajan de lunes a viernes con joranada de trabajo de 4 horas por día, en los horarios de la mañana (de las 8 a las 12 horas) o por la tarde (de las 14 a las 18 horas). Los adolescentes reciben 1(un) sálario mínimo, abonos de transporte de acuerdo con el local de la vivienda, bono alimentación, divisa de identificación y uniforme (camisa blanca personalizada).
Para ingresar en el Pro-Adolescente, el joven debe tener entre 15 y 16 años y cumplir con los siguientes requisitos:
- Vivir en el Distrito Federal;
- estar matriculado en la esculea pública o ser becario de escuela particular;
- asistir a partir del 8º año de la Educación Primaria regular; y
- tener renta familiar per capita igual o inferior a 1/2 salarios mínimos.
El adolescente aprendiz admitido en el programa desarrolla calificación en diversas actividades, ofreciéndose capacitación en las áreas de atención al público de forma presente o telefónica, nociones de informática, nociones de secretariado, nociones de ciudadanía y mercado de trabajo, técnicas de recepción, archivo y protocolo. El adolescente puede aún disfrutar del conocimiento de las responsabilidades orgánicas de una gran Institución y sobre todo del seguimientoin loco del Proceso Legislativo Brasileño.
El Programa Pro-Adolescente fue premiado en 1er lugar en la categoria de Persona Jurídica - Proyectos Sociales, Edición 2006, del Premio Candango de Excelência em Recursos Humanos promovido por la Asociación Brasileña de Recursos Humanos.