Diputados discrepan sobre mantenimiento de Cesare Battisti en Brasil
La decisión del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva de no extraditar el italiano Cesare Battisti repercutió entre los parlamentarios. Encarcelado en Brasil hace cuatro años, el ex activista fue condenado por la justicia de Italia a la prisión perpetua por muertes ocurridas en la década de 70, cuando integraba organizaciones de extrema izquierda.
El diputado oposicionista José Carlos Aleluia criticó la decisión. "¿Soberanía para proteger bandido? El presidente dio mal ejemplo al País. Lula salió haciendo el peor que podría hacer, poner en libertad un bandido en Brasil, un asesino que mató padre de familia en Italia, que no era político, era un bandido. Brasil no es casa de bandido. Nosotros ya tenemos criminalidad demás.”
En la evaluación del parlamentario baiano, el presidente de la República resolvió “practicar lo más vergonzoso acto de su gestión en la salida, esperando que las personas no percibiesen por cuenta de las fiestas de fin de año”. Él observa que la reacción internacional es muy grande y que tiene esperanzas de que el Supremo Tribunal Federal (STF) no acepte la decisión del presidente Lula.
Según lo parecer de la Abogacía-General de la Unión (AGU), base para la decisión del ex presidente Lula, la extradición de Cesare Battisti podría significar riesgo para la vida del preso. El caso necesita pasar por nuevo análisis del STF, qué apenas debe ocurrir en febrero, después de las vacaciones del Judiciario.
Acto de soberanía
Para el líder del PT, diputado Fernando Ferro, la decisión fue un acto de soberanía de Brasil. "El presidente actuó de acuerdo con un análisis de la AGU, actuó de acuerdo con los tratados internacionales. El presidente Lula actuó como un jefe de Estado con autonomía e independencia, que no puede curvarse a presiones de intereses políticos o ideológicos de cualquier país."
Según el diputado, no se vio “esa misma furia de Italia cuando se negó también a extraditar el [ex banquero Salvatore] Cacciola para Brasil por los compromisos de ciudadanía que él tenía”. A él, no hacen sentido las críticas a la decisión presidencial.
Italia critica
La posición brasileña fue criticada por el primer ministro de Italia, Silvio Berlusconi, que considera inaceptable una posible decisión por el asilo político a Battisti.
El embajador de Italia en Brasil llegó a ser llamado de vuelta a Roma después del acto de Lula, pero postergó la vuelta para participar de la pose de la presidente Dilma Rousseff, lo que fue interpretado por la diplomacia brasileña como una señal de que las relaciones entre los dos países no fueron estremecidas.