La Comisión de Relaciones Exteriores y de Defensa Nacional aprobó este miércoles el acuerdo Brasil-Francia en el área de submarinos, firmado el 23 de diciembre del 2008. El texto, que integra el Mensaje 908/09, del Poder Ejecutivo, prevé apoyo y cooperación en el dominio de las tecnologías de defensa, con el objetivo de hacer viable el desarrollo del programa brasileño de fuerzas submarinas.

El acuerdo determina que haya cooperación en los métodos, tecnologías, herramientas, equipos y asistencia técnica en todas las fases del proyecto de submarinos convencionales del tipo Scorpène (SBR), así como de un submarino con armamento convencional (SNBR) destinado a recibir un reactor nuclear, desarrollados por Brasil.

También está prevista la asistencia para la concepción y construcción de un astillero adecuado a esos submarinos y de una base naval capaz de abrigarlos. Habrá aún cooperación para la concepción, la construcción y el mantenimiento de las infraestructuras y de los equipos necesarios para la parte nuclear.

La colaboración se dará desde la adquisición de cuatro submarinos SBR, con transferencia de tecnología ampliada para todas las fases de ese proyecto de submarinos.

Transmisión de conocimiento
El acuerdo establece la transferencia de conocimiento académico relativo a submarinos, en las áreas de la ciencia y de la tecnología, por medio de formación de estudiantes, maestros e instructores en instituciones pertenecientes al Ministerio de la Defensa, en complemento a las cooperaciones existentes en materia de formación de los dominios conexos.

Brasil se compromete a no autorizar la reexportación, la reventa, el empréstito, la donación o la transmisión del conocimiento, de la tecnología y de los equipos suministrados por Francia sin la concordancia previa del gobierno francés, y a utilizarlos solamente para los fines definidos por el acuerdo, que valdrá por tres años después del primer buceo del primer submarino SNBR, no pudiendo exceder el límite de 25 años.

Opción adecuada
El relator del Mensaje 908/09, diputado Raul Jungmann, afirmó que las necesidades nacionales de uso de los submarinos y las condiciones del acuerdo con Francia muestran que la opción por el modelo Scorpène es la más adecuada. Recordó que inicialmente Brasil se quedó entre los modelos alemán, ruso y francés.

Jungmann resaltó que los submarinos de propulsión nuclear son mejores para las estrategias de maniobra porque, en razón de su autonomía y velocidad media, no se limitan a las áreas de la costa. Ésa fue la razón por la cual fue desechada la propuesta alemana de renovación de la flota nacional.

El diputado destacó todavía que el Scorpène era lo que mejor atendía a la Marina de Brasil, no apenas por ser tecnológicamente más moderno, pero, principalmente, por su mayor intervalo entre mantenimientos, factor primordial para Brasil, cuyos intereses marítimos se extienden, prioritariamente, por todo la extensión del Atlántico Sur.

Traducción - Grupo Solucion-SP Language/Paulo de Holanda Morais