Para sostener los cambios exigidos por el Plan Brasil 2022, el País tendrá de crecer, en media, 7% por año desde 2011, según afirmó este miércoles el ministro-jefe de la Secretaría de Asuntos Estratégicos (SAE) de la Presidencia de la República, Samuel Guimarães. "Puede parecer improbable, pero creo que conseguiremos", dijo él, en audiencia pública promovida por las comisiones de Amazonia, Integración Nacional y de Desarrollo Regional; de Desarrollo Económico, Industria y Comercio; y de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible.

El Plan Brasil 2022 es un paquete de metas sociales, económicas y ambientales para el País en el año que será el del bicentenario de su independencia. Entre las medidas propuestas en la versión preliminar, divulgada por la SAE hace dos semanas, está el fin del analfabetismo, de la pobreza absoluta (ciudadanos que viven con menos de dos dólares por día) y de la desnutrición hasta 2022. La versión final del documento será entregue en el día 30 de junio al presidente Luiz Inácio Lula da Silva.

De acuerdo con Guimarães, el País tiene capacidad de invertir en la expansión de la actividad productiva y, en consecuencia, mejorar la calidad de vida de todos los brasileños: "El BNDES mueve cerca de R$ 180 mil millones por año. Los impuestos recaudados con las empresas generan los recursos necesarios al gobierno para los programas sociales y la construcción de carreteras, por ejemplo." Guimarães resaltó también la relevancia del Congreso Nacional en la elaboración de políticas públicas vueltas al crecimiento del País.
 

América del Sur
La reducción de las disparidades económicas entre Brasil y los demás países de América del Sur es otro desafío a ser enfrentado para alcanzar las metas del Plan Brasil 2022, según Guimarães. "La prosperidad de los vecinos favorece nuestro desarrollo, pues intensifica las transacciones bilaterales", argumentó.

De acuerdo con Guimarães, actualmente Brasil presenta un elevado superávit comercial con relación a los países sudamericanos. La única excepción, según él, es Bolivia, en razón del comercio de gas natural. Para el ministro, la inclinación es a de que el "abismo" entre las naciones aumente, caso Brasil no invierta en políticas de integración. "Nuestra pauta exportadora es mucho más diversificada del que la de nuestros vecinos; luego, el desequilibrio tiende a crecer", advirtió. Samuel Guimarães defendió la implementación de programas multinacionales en las áreas de transporte, energía y telecomunicaciones.

Plan ambicioso
Otras metas establecidas por el Plan Brasil 2022 son ampliar lo empleo formal; igualar los salarios de hombres y mujeres; universalizar el acceso a la banda ancha; triplicar la red de metro en las grandes ciudades; y alcanzar la autonomía en la producción de medicamentos. "El plan es ambicioso, sin embargo ejecutable", defendió a Guimarães.

El diputado Dr. Ubiali (PSB-SP), sin embargo, alertó para la dificultad del País cumplir algunas de las metas estipuladas, como la que reduce a cero el nivel de deforestación. Defendió la importancia del plan de metas, en especial por prever la universalización de la enseñanza en tiempo integral.

Ya el diputado Fernando Marroni (PT-RS) enalteció las metas ambientales del Plan Brasil 2022. El paquete prevé estrategias de incentivo al uso de energías alternativas, y según Marroni el plan debe aportar para que Brasil abra un ciclo de consumo consciente en el mundo. "El planeta no aguanta más el consumo predatorio de Estados Unidos y de algunos países europeos", alertó.

Reportaje - Marcelo Oliveira
Edición - Maria Clarice Dias
Traducción - Grupo Solucion-SP Language/Paulo de Holanda Morais