La Cámara analiza el Proyecto de Ley 7675/10, del Ejecutivo, que autoriza el gobierno federal a administrar los recursos de Brasil en cuentas del Fondo Monetario Internacional (FMI), incluso para aportar con iniciativas para el alivio financiero de deudas de otros países-miembros.

En la justificativa, el gobierno aclara que la situación de Brasil en el FMI es, desde 2005, de no deudor, y por eso el País podría ayudar con los recursos a que tiene derecho en iniciativas del Fondo junto a países en necesidad. Pero es necesaria la autorización del Congreso para ese tipo de iniciativa.

En el ejemplo hecho por el gobierno, Brasil podría sacar los recursos de la cuenta de contingencia, llamada de SCA-1, que sirve de garantía para empréstitos. La cuenta fue instituida con el objetivo de proteger el Fondo de riesgos en el atraso de pago de empréstitos concedidos, a la semejanza de una cuenta de provisión para deudores dudosos.

Actualmente, el FMI estudia usar estos recursos, de diversos países, para cancelar la deuda de la Liberia, país de África Occidental. Pero el ministro de la Hacienda, en la condición de gobernador representante de Brasil en el FMI, pudo apenas decir que el País tiene la intención de ayudar, sin poderes para liberar los recursos. Como, en última análisis, la cancelación será una donación de recursos para la Liberia, el gobierno precisa de esa autorización.

El proyecto será examinado por las comisiones de Relaciones Exteriores y de Defensa Nacional; de Finanzas y Tributación; y de Constitución, Justicia y Ciudadanía.

Traducción - Grupo Solucion-SP Language/Paulo de Holanda Morais