Integrantes del Parlamento de Mercosur (Parlasur) dijeron el martes (06) que el abarcamiento del bloque debe ir además de los intereses comerciales, priorizando también las cuestiones ambientales en los debates y negociaciones. En seminario realizado en el Senado sobre la biodiversidad de la región, dos parlamentarios brasileños y un paraguayo defendieron también una mayor participación del Parlasur en las negociaciones entre los Ejecutivos de los países del bloque.

La medida favorecería la integración plena de las naciones, que comparten diferentes biomas, como recordaron el diputado José Paulo Tóffano, el senador Geraldo Mesquita Júnior y el parlamentarlo paraguayo Carmelo Benítez, que es vicepresidente de la Comisión de Medio Ambiente del Parlasur.

“Entre 30% y 40% de las propuestas aprobadas por el Parlasur tienen carácter ambiental, pero los poderes ejecutivos aún no atinaron para eso y no llevan el Parlamento en cuenta en sus tratados”, resaltó Tóffano, que es presidente de la Representación Brasileña en el Parlasur. El diputado también lamentó que las decisiones del Parlasur aún no sean deliberativas, pero indicativas. O sea, los gobiernos pueden adoptarlas o no.

Equivalencia de las leyes
Los parlamentarios destacaron, sin embargo, que el medio ambiente es una de las áreas en las que debía haber una equivalencia entre las legislaciones de diferentes países, pues muchas veces los problemas son los mismos. Ejemplo es la producción de energía por Brasil y Paraguay desde las fuentes de agua existentes entre los dos países.

“Las reglas deben ser igualmente cumplidas por los dos lados. Todos tenemos la misma necesidad y el mismo deber de conservar el acuífero Guaraní”, dijo Carmelo Benítez, en referencia con la reserva subterránea de agua dulce ubicada entre Brasil, Paraguay, Argentina y Uruguay.

Con relación al acuífero, el abogado argentino y experto en Derecho Aduanero de Mercosur Alejandro Perotti alertó para la necesidad del bloque firmar lo más rápidamente posible un acuerdo para su gestión. “La ONU [Organización de las Naciones Unidas] tiene la intención de declarar el acuífero como patrimonio de la humanidad. La única forma de evitar eso y garantizar la soberanía de los países de la región es firmando el acuerdo que estuvo cerca de ser firmado hace algunos años”, afirmó.

En la opinión de Perotti, el Parlasur debía aún ser el órgano controlador de la aplicación de la Declaración sobre Estrategia de Biodiversidad de Mercosur, firmada en 2006 por los ministros de Medio Ambiente del bloque. El documento establece directrices y prioridades para la integración de acciones de los países para conservación de la biodiversidad, su uso sostenible y la participación justa e igualitaria en los beneficios. Según el abogado, las directrices serían más fácilmente cumplidas si el Parlasur fuese responsable por la tarea de fiscalizarlas.

Desarrollo regional
En el seminario, los parlamentarios recordaron todavía que las decisiones relativas al medio ambiente tendrán repercusión económica en las sociedades del bloque, llevando desarrollo para la región. “¿Será qué nos interesa tener vecinos pobres? Los países tienen mucho más a ofrecer que apenas la cuestión financiera. Tenemos aquí biomas únicos y tenemos que cuidar de ellos”, condensó Tóffano.

El senador Geraldo Mesquita complementó diciendo que las poblaciones envueltas aún no tienen conciencia de lo que el bloque puede representar para América del Sur. “Las personas necesitan apropiarse de Mercosur, que hoy es una estructura burocrática que piensa esencialmente en economía.”

El objetivo del encuentro es discutir soluciones para problemas ambientales ya identificados por organizaciones gubernamentales y no gubernamentales.

Traducción - Grupo Solucion-SP Language/Paulo de Holanda Morais