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Fuerza de Paz brasileña en Haití

El ministro de Defensa, Nelson Jobim, afirmó el miércoles (9) que no existe plazo para que las tropas brasileñas dejen la misión de paz de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Haití. Para Jobim, que participó de audiencia pública en la Comisión de Relaciones Exteriores y Defensa Nacional, la estrategia de salida de Brasil está “relacionada a la estrategia de construcción del país [Haití]”.

Cuestionado por el diputado Raul Jungmann (PPS-PE) acerca de un plazo para la salida, Jobim pronunció que no es posible definir una fecha porque el fin de la misión militar "depende de respaldo internacional" y ella está extremamente unida a la “construcción y mantenimiento de la paz” en ese país.

Jobim recordó que el país caribeño sufre de graves problemas estructurales, como falta de energía eléctrica en la capital, Puerto Príncipe. Él defendió la construcción de la Usina Eléctrica Artibonite, con gasto de 150 millones de dólares, para permitir el funcionamiento de industria y emprendimientos que posibiliten la generación de trabajo y renta.

Costo
Hasta el momento, Brasil gastó alrededor de R$ 704,5 millones con acciones de Paz en Haití, desde 2004. Como hay reembolso de la ONU por el hecho de tratarse de una acción internacional, el costo presupuestario efectivo fue de cerca de R$ 415 millones en el periodo. En 2009, hasta ahora, fueron destinados R$ 108 millones (el mayor valor anual), incluidos los reembolsos. Los recursos son destinados al mantenimiento de la tropa, a obras de ingeniería y a acciones sociales.

Rotación semestral
Al respecto de las tropas, Jobim informó que el batallón de infantería brasileño está formado actualmente por 1.016 hombres, mientras que el grupo de ingenieros suma 250 personas. Brasil realiza rotación semestral de sus tropas siendo la próxima en el periodo entre 10 a 29 de enero – será la 11º rotación. Hay, aún, vehículos brasileños en Haití.

“Muchos apoyan que Brasil debe retirarse de Haití. El Ministerio de Defensa y el gobierno apoyan que Brasil debe permanecer en Haití, aunque eso represente un gasto para el Presupuesto brasileño”, declaró el ministro.

Cazas para la FAB
Durante la audiencia, el diputado Wilson Picler (PDT-PR) anunció que remitirá a los Presidentes de la Cámara, Michel Temer, y del Senado, José Sarney, una petición sugiriendo que el informe elaborado por el Comando de Aeronáutica sobre los modelos de aeronaves más adecuados sea determinante en la licitación de 36 cazas que el gobierno brasileño pretende fabricar para reequipar la Fuerza Aérea Brasileña (FAB). Las empresas que disputan ese mercado son la norteamericana Boeing, la francesa Dassault y la sueca Saab.

Jobim, sin embargo, disminuyó la iniciativa, alegando que el informe del Comando de Aeronáutica es un documento técnico que no puede influir en una decisión mayor del gobierno, referente a la política industrial de defensa nacional, pues entre los criterios para la compra de los aviones está la transferencia de tecnología. “Quien define la política industrial es el poder civil. Tenemos amplia experiencia de embargos de países que prometieron transferencia de tecnología y no cumplen”, informó. Picler declaró que su petición contiene 195 firmas de parlamentarios.

Reportaje – Rodrigo Bittar
Edición – Newton Araújo
Traducción - Grupo Solucion-SP Language/Maria Laura Ocampo