Ecuador: nuevas obras brasileñas en infra-estructura aguardan definiciones políticas
Relación de Ecuador con empresas brasileñas debe mejorar, acredita el Itamaraty
El Ministerio de las Relaciones Exteriores de Brasil (Itamaraty) está confiando de que la relación de Ecuador con empresas brasileñas irá mejorar, no siendo necesarias, por el momento, nuevas manifestaciones de insatisfacción a las actitudes de aquel país.
En audiencia pública en la Comisión de Constitución y Justicia y de Ciudadanía (CCJ) el miércoles (12), el ministro interino de las Relaciones Exteriores, Samuel Pinheiro Guimarães, recordó que, por cuenta del tratamiento dispensado en Ecuador las compañías nacionales, como Petrobras y Odebrecht, el gobierno brasileño aplazó las negociaciones para la realización de obras de infra-estructura uniendo puertos de los dos países. El proyecto, segundo Pinheiro Guimarães, es de gran interés de Ecuador.
Diferentes integrantes de la CCJ se muestran preocupados con la inseguridad enfrentada por las empresas brasileñas en Ecuador. El diputado Colbert Martins (PMDB-BA) anunció que va a proponer la suspensión por el Parlamento de todos los acuerdos bilaterales firmados entre Brasil y Ecuador hasta que la situación sea resuelta. La medida cuenta con el apoyo del autor del requerimiento para la realización de la audiencia, diputado Efraim Filho (DEM-PB).
Préstamos del BNDES
El embajador destacó que, por ahora, los préstamos tomados por el Ecuador con el Banco Nacional de Desenvolvimiento Económico Social (BNDES) están siendo pagos en día.
Según Pinheiro Guimarães, la expectativa ahora es para saber si, en diciembre, cuando vence más una cuota de la cantidad prestada para la construcción de la hidroeléctrica de San Francisco, el gobierno de Rafael Correa va a cumplir el contrato.
"Vamos actuar en la medida en que se vayan colocando los hechos. No vamos a anticiparnos y vamos actuar con la debida prudencia. Acreditamos que ese tipo de comportamiento también afecta otros eventuales inversionistas y otras empresas de ingeniería que vengan a desear operar en Ecuador. Claro que, ellas llevarán en cuenta lo que ocurrió. De modo que acreditamos que, teniendo en cuenta las características del país, su economía, ese comportamiento tendrán que modificarse para mejor. Hasta por una cuestión de interés del propio país", destacó.
Quiebra de acuerdo
El gobierno ecuatoriano acusa la contratista brasileña Odebrecht de no cumplir con los acuerdos de reparación de los perjuicios provocados por problemas en la Usina Hidroeléctrica de San Francisco, construida por la empresa. El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, llegó a mandar el Ejército a ocupar canteros de obras de la compañía, además de impedir que funcionarios de la empresa con sede en el estado de Bahia dejasen aquel país. Pero recientemente, esos brasileños fueron expulsados de Ecuador, que también decidió rescindir los cuatro contratos de la Odebrecht en curso.
El vicepresidente para América Latina y Angola de la Odebrecht, Luiz Antonio Mameri, informó que la empresa sanó todos los problemas de la hidroeléctrica, que, segundo el, sufría principalmente con exceso de sedimentos en el agua. Mameri dice que el gobierno ecuatoriano cobra de la Odebrecht el resarcimiento de US$ 30 millones que el país tendría perdido con la suspensión temporaria de las actividades de la usina. Pero, segundo el funcionario de la contratista, ese tipo de cobro no está previsto en el contrato.
A pesar de los problemas, Mameri afirmó que la empresa aún acredita en un entendimiento con la gestión de Rafael Correa. "Todavía no concluimos las negociaciones. Acreditamos que podemos llegar a un buen término a respecto de la cuestión. Desde nuestro punto de vista, está habiendo un gran mal entendido con el gobierno ecuatoriano. Creemos que vamos a dar continuidad a nuestros proyectos en aquel país", afirmó.
Reportaje - Ana Raquel Macedo/Rádio Câmara
Edición - Marcos Rossi